El cambio climático es uno de los retos principales en la actualidad. La contaminación y el consumo excesivo aumentan rápidamente las emisiones de gases de efecto invernadero, calentando nuestro planeta a un ritmo alarmante. El informe del IPCC de 2021 alertó con un código rojo para la humanidad y expuso los efectos desastrosos del aumento de las temperaturas. El deshielo de los polos incrementa el nivel de nuestros mares, poniendo en peligro las zonas de costa. Las aguas de los océanos son cada vez más cálidas, lo que conduce a la acidificación, afectando la fauna y la flora. Unas temperaturas más altas provocan tormentas más intensas, inundaciones, fuertes nevadas y sequías más prolongadas y frecuentes. Además, disminuye la cantidad de agua dulce, lo que limita nuestra capacidad para cultivar y producir alimentos.

“En 2021, el calentamiento global era más rápido que nunca. Existe una sensación de inquietud que llama a la acción, y no a las palabras, para minimizar y evitar el daño que nosotros, los seres humanos, hemos causado al planeta”, dijo Eric Rondolat, CEO de Signify en el Informe de Acción Climática. “Para Signify, esto significa que debemos incrementar nuestros esfuerzos, no solo en nuestras operaciones, sino en toda nuestra cadena de valor, y ayudar a nuestros stakeholders a jugar su papel en la minimización del impacto del cambio climático”.